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Leer más1. © Naufragia 2018. Intervención en foto-manipulación a fotografía de Pexels.
¿Se puede ver a los videojuegos como arte?… El planteamiento suele ser visto como un absurdo, aún dentro del mundo académico; y es que si nos ponemos a evaluar a esta forma de expresión lúdica de una manera superficial, resulta casi imposible hallar el arte en ello. Pero detengámonos un momento y escarbemos un poco sobre la superficie del mundo virtual, ya que de otra manera, resultaría imposible entender el porqué el Museo de Arte Moderno de Nueva York (MOMA), como nos indica Antonelli (2012), ha añadido a catorce videojuegos a su colección permanente (entre los que se encuentran, por mencionar algunos, Pacman, Tetris, flOw y Los Sims). Aún más: muchos otros museos (Museo de Arte Moderno de San Francisco, Museo Whitney de Arte Americano, entre otros) han aceptado y hecho conferencias o eventos acerca de los videojuegos como forma de arte.
2. Videojuego Pacman. Creado por Namco. (Adquirido por el MOMA)
¿Cuál es el objetivo de un videojuego?
Comencemos entonces, por nuestro recorrido acerca del mundo virtual de los videojuegos. Ahora bien, analicemos, aunque de manera un poco general, el objetivo de un videojuego. Su enfoque principal es, como lo indica su nombre, de fin lúdico: busca entretener al usuario, por lo que se convierte en un producto de mercado. En este sentido solo puede compararse al diseño, a una buena artesanía, a una buena venta.
Aún nada nos indica que podamos ver a los videojuegos como arte, pero ¿qué disciplinas pueden ser consideradas Arte en su totalidad? Hablemos por un instante sobre la literatura. No es lo mismo leer al maravilloso Cortázar, que desgarra con pasión a sus páginas, o al tenebroso Horacio Quiroga, que a un novato en la narración o una novela que es un mero producto de mercadeo. ¿No puede aplicarse lo mismo para analizar a los videojuegos como arte a aquellos que incluyen narrativa profunda? (como por ejemplo a algunos de los famosos RPG: Role Playing Games).
El asunto está en la posibilidad
Este ensayo intentará reflejar la opinión de una comunidad contemporánea que lucha por la aceptación de los videojuegos como arte, o más bien, una posible forma de Arte; no solo desde el punto de vista narrativo, sino también como experiencia estética que puede hallarse en la interfaz y en la interactividad con un mundo virtual, e incluso en su algoritmo. Recordemos, una vez más, cómo fue rechazado el impresionismo en su época; e intentemos abrir la mente a nuevos parámetros en nuestra contemporaneidad.
3. Final Fantasy 7 (Ejemplo de un RPG con características narrativas formidables). Creado por Squaresoft, actualmente Square–enix.
La complejidad del videojuego
Hay que tener claro que, como lo indica Mark J.P. Wolf (2005), la teoría del videojuego es un punto de convergencia de una gran variedad de enfoques y disciplinas (cine, televisión semiótica, performance, estudios del juego, teoría literaria, informática, teorías del hipertexto, cibertexto, interactividad e identidad, posmodernismo, teoría de los medios de comunicación, teoría de los simulacros, psicología, estética, narratología, teoría del arte, entre otras). Por ello, concebir a los videojuegos como arte puede resultar extremadamente complejo.
Sin embargo, el mismo Mark asegura que a su vez los videojuegos contienen características únicas, por lo que se han vuelto inclasificables dentro de cualquier disciplina, indicándonos que se deben tratar de manera individual pero sin perder de vista a cada enfoque que influye en los videojuegos. Teniendo en cuenta lo complejos y completos que son, nos podemos dar una idea más aproximada de si son ontológicamente y socialmente apropiados para ser considerados Arte. Pero la complejidad no es suficiente.
La filosofía estética y los videojuegos
Resulta triste que, como lo asegura Smuts (2005) la filosofía estética haya ignorado completamente a los videojuegos y al arte basado en tecnología, mientras que en otras disciplinas, como el cine, los académicos han tomado la iniciativa del debate conceptual (Esto lo complementa la opinión de Jenkins (2012), quien explica que se han hecho conferencias en numerosas universidades, incluyendo al MIT, acerca del Arte en los videojuegos, pero que se basan en campos como la economía, la cultura y la sociología, más no en categorías estéticas).
El videojuego: más que un performance
Además, Smuts realza también la interesante comparación que se puede dar entre el ajedrez como arte y los videojuegos; ambos con elementos lúdicos y competitivos, sin que eso anule su posible valor artístico. Sin embargo, concluye, en el Ajedrez y otros deportes considerados artísticos, a diferencia de los videojuegos, se busca evaluar la calidad artística en el “performance” de los ejecutores, no en el juego o deporte en sí mismo.
En los videojuegos la importancia radica no tanto en el jugador, (al menos no en la mayoría de casos), sino en el videojuego en sí mismo. Asegura, finalmente, que el videojuego no se reduce solo a una serie de reglas como cualquier deporte, sino que es muy amplio (tiene narrativa, diseño gráfico, diálogos, caracterización y más); rompe una barrera que el cine nunca podrá romper: La interactividad. Los considera el primer arte masivo “cocreativo”, que se puede interpretar en que está hecho por autores interdisciplinarios, para finalmente ejecutarse por muchos jugadores simultáneamente, cada uno produciendo micro-realidades distintas en el videojuego. Así, nos podríamos estar acercando a concebir a los videojuegos como arte.
4. Exposición de Los Sims (versión 2002) en el MOMA.
5. Videojuego flOw (2006) Por Jenova Chen y Nicholas Clark. (Adquirido por el MOMA).
Críticas sobre los videojuegos como arte
Aún con visiones bien establecidas como la de Smuts y Jenkins, encontramos a muchos teóricos y críticos del arte, así como también directores de videojuegos, que no parecen estar muy de acuerdo en considerar al videojuego como arte. Jack Kroll, famoso crítico de cine en “Newsweek”, aseguró en la edición de esta revista del año 2000, en marzo, que los creadores de videojuegos deberían conformarse con el dinero que ganan por sus productos, y que el elevarlos al estado de Arte está fuera de contexto, por no poder transmitir emociones complejas que son la raíz de toda forma artística.
Entre otras críticas tajantes encontramos la de Robert Ebert (2010), quien en síntesis explica en su página web que nadie en el campo de la crítica del arte ha sido capaz de citar a un videojuego digno de comparación con cualquier forma convencional de Arte (incluyendo al cine), por lo que reduce al videojuego como una experiencia visual, la cual representa una pérdida de tiempo para la mayoría de jugadores, y que no llega a elevarse a tal estatus. En este sentido, se complica concebir a los videojuegos como arte.
Otro argumento importante que aporta Ebert es que la diferencia más obvia entre arte y juegos es que un juego puede ganarse, tiene reglas objetivos y un resultado; el Arte es simplemente una experiencia estética sin objetivos o reglas. Este punto ha sido uno de los más profundizados por distintos detractores del videojuego como Arte. Aun así, Ebert pareció arrepentirse de sus propios argumentos, aún si fuese solo en parte, tras jugar el videojuego Cosmology of Kyoto, admitiendo a los videojuegos como un arte en un sentido no tradicional como la prosa o el cine (pues estos dos se concentran en la narrativa, mientras que el videojuego es narrativa sumado a jugabilidad e interactividad).
Finalmente, podemos citar también a Hideo Kojima, diseñador de videojuegos, quien asegura en una entrevista (recuperada por el portal Vidaextra, 2006) que un juego está hecho para entretener y es más un servicio que una forma de arte, aun si contiene elementos gráficos y visuales o narrativas más allá de la jugabilidad. Esto es impactante, pues los juegos de Kojima cuentan con una amplia complejidad narrativa, originalidad relativa en sus elementos compositivos y una calidad gráfica alta. Si Kojima, uno de los diseñadores más populares, no ve a los videojuegos como arte, es un punto interesante a reflexionar.
6. Solid Snake de Metalgear Solid. Videojuego diseñado por Hideo Kojima bajo la compañía Konami.
¿Las obras de arte tienen un solo fin?
Como respuesta a estas críticas, más que ponerme a discutir sobre las experiencias estéticas que hacen sentir los videojuegos y del porqué son indudablemente Arte, como ya lo han asegurado otros, quiero dejarle esta pregunta al lector: si el fin del videojuego es el de entretener al usuario, ¿Causa esto una repercusión tal de inhabilitar la experiencia estética?, ¿Podemos asegurar que toda actividad u objeto que tenga un propósito otro que el estético deja de ser arte? Resulta difícil estar de acuerdo con esta postura que claman los detractores que no ven a los videojuegos como arte.
De la misma manera, no todo objeto que tenga un fin estético únicamente es arte. Perfectamente podemos pensar en el videojuego como una actividad de propósitos múltiples, como lo son también el teatro, el cine, la música y la literatura. Si realmente su único propósito fuese el estético, lo más seguro es que no fuesen lucrativos para la industria; y sí que lo son.
Además del ámbito lucrativo del arte, cabe resaltar que muchas obras maestras se han utilizado más para hacer crítica social, para realzar un mensaje, para entretener, para adiestrar y enseñar o para hacer propaganda, que para su fin estético únicamente; y esto lo podemos ver incluso en las grandes obras de la Antigüedad y la Edad Media.
Reflexiones finales
Más que intentar convencerte de si los videojuegos son o no arte, espero poder levantar tu curiosidad acerca del tema e invitarte a que también te cuestiones lo mismo.
Lo que es cierto es que los distintos filósofos y teóricos del arte deberán tomar al videojuego de ahora en adelante con más seriedad; pues si bien algunos como Ebert ya lo han hecho, aún falta un largo camino por recorrer: indagar no solo en sus repercusiones sociológicas y económicas, sino también en el núcleo estético que hay en ellos. No solo deben evaluarse desde el punto de vista visual, sino también de su jugabilidad y narrativa dignas de apreciarse; o incluso en el campo musical. Es en la armonía entre todas sus partes donde podemos hallar una sensación más allá del mero entretenimiento: una verdadera máquina generadora de emociones, eso es lo que para muchos significa un videojuego.
Confío en que las nuevas generaciones irán adaptándose a la concepción de los videojuegos como arte cada vez de manera más abierta, así como también pienso que podemos esperar mucho de las empresas creadoras de videojuegos en los próximos años: es un género que aún está madurándose, pues su exploración es aún muy nueva.
De cualquier manera, es ya un paso enorme en la indagación del medio el que han dado numerosos museos, pero no olvidemos que cada videojuego debería ser evaluado y analizado estéticamente de manera independiente (recordando que un alto valor estético no lo convertiría en arte, pero sería un paso hacia ello).
Y tú, ¿piensas en los videojuegos como arte? Me encantaría leer tu opinión en los comentarios.
7. Assassins Creed Revelations, de Ubisoft.
Bibliografía:
Antonelli, P. (2012). Videogames: 14 in the collection, for starters. [Artículo en Red]. Disponible en: http://www.moma.org/explore/inside_out/2012/11/29/video-games-14-in-the-collection-for-starters/. [Consultado el: 19/10/2014].
Ebert, R. (2010). Videogames can never be Art. [Artículo en Red]. Disponible en: http://www.rogerebert.com/r gers-journal/video-games-can neverbe- art. [Consultado el: 17/02/2014].
Jenkins, H. (2012). Games, the new lively art. [Artículo en Red]. Disponible en: http://www.bendevane.com/ TA2012/wp-content/uploads/2012/01/jenkins.games_.pdf. [Consultado el: 19/10/2014].
Mark J.P. Wolf, B. (2005). Introducción a la Teoría del Videojuego. [Artículo en Red]. Disponible en: http://www.raco.cat/index.php/Formats/article/viewFile/257329/344420. [Consultado el: 19/10/2014].
Portal Vida Extra (2006). Kojima: “Creo que los videojuegos no son Arte” [Artículo en Red]. Disponible en: http://www.vidaextra.com/cultura/kojima-creo-que-los-videojuegos-no-son-arte. [Consultado el: 17/02/2014].
Smuts, A. (2005). Are videogames Art?. [Artículo en Red]. Disponible en: http://quod.lib.umich.edu/c/ca/7523862.0003.006?rgn=main;view=fulltext [Consultado el: 19/10/2014].
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yuliana guédez forgiarini
Soy apasionada por conceptos universales e individuales relacionados a los seres humanos. Naufragia es mi bitácora abierta con un énfasis en la fotografía, el arte y el diseño; así como también la investigación humanista. Exploro y me sumerjo en cada proyecto hasta alcanzar su alma. Estoy abierta a comisiones y buenas conversaciones. ¿Quieres unirte a mis aventuras?
